Nueva York, 16 de octubre de 2025 — La familia del dominicano Allan Feliz, quien fue abatido por un oficial del NYPDdurante una parada de tráfico en el Bronx en 2019, presentó este miércoles una demanda ante la Corte Suprema de Manhattan para exigir la destitución inmediata del teniente Jonathan Rivera y anular la decisión de la comisionada Jessica Tisch de mantenerlo en funciones.
La acción legal fue interpuesta por los familiares de Feliz, junto con organizaciones de derechos civiles como el Comité de Justicia. En ella solicitan que un juez declare inválida la decisión administrativa de Tisch y ordene la separación del oficial del cuerpo policial.
Antecedentes del caso
- En octubre de 2019, el sargento Jonathan Rivera (luego ascendido a teniente) disparó contra Allan Feliz durante una parada de tránsito en el Bronx.
- Un juez administrativo de la Policía, Rosemarie Maldonado, halló que Rivera usó fuerza excesiva, cuestionó su testimonio y recomendó su despido.
- Sin embargo, la comisionada Tisch revisó la decisión y, en una medida que ha sido calificada como inusual, decidió mantener al oficial en su puesto, basándose en su interpretación de la evidencia y los informes presentados.
Tras la decisión, familiares de Feliz y grupos de activismo han movilizado protestas frente a la sede del NYPD, acusando a Tisch de ignorar el veredicto interno del cuerpo para proteger a sus oficiales.
La alcaldía y miembros del Ayuntamiento también reaccionaron con críticas. El presidente del Concejo de Nueva York y varios concejales emitieron un comunicado conjunto señalando que la decisión de Tisch “traiciona la confianza pública” al desconectarse de las recomendaciones internas de responsabilidad policial. Puntos clave que plantea la demanda
Justificación de uso de fuerza
El caso gira en torno a la interpretación de si el disparo fue defendible como acción necesaria para proteger la vida de otro oficial, argumento que Tisch aceptó al justificar su decisión.
Autoridad discrecional y legalidad
La familia pide que el tribunal revise si Tisch actuó dentro de la ley al contradecir una decisión judicial interna del departamento. Alegan abuso de discreción y que su acción vulnera los mecanismos de rendición de cuentas dentro del NYPD.
Promoción durante investigación pendiente
Al momento de su ascenso, Rivera tenía cargos disciplinarios abiertos relacionados con el asesinato de Feliz, lo que para muchos refuerza el reclamo de que no debería haber estado en posición de mando.
Presión política y precedentes
Abogados del caso afirman que esta demanda representa un esfuerzo poco frecuente de llevar decisiones internas del NYPD ante los tribunales, buscando transparencia institucional y precedentes legales en casos de violencia policial.
Repercusiones y próximos pasos
El éxito de este litigio podría marcar un parteaguas en la forma en que las decisiones disciplinarias dentro de cuerpos policiales como el NYPD son supervisadas judicialmente. Si el tribunal anula la determinación de Tisch, podría obligar a que oficiales con sanciones recomendadas para despido sean efectivamente removidos, incluso si la alta cúpula intentara revertir esa decisión.
Por ahora, la demanda deberá someterse a admisión, y Tisch tendrá la oportunidad de contraargumentar ante la corte. En paralelo, la presión mediática, el activismo comunitario y el escrutinio institucional continuarán siendo factores decisivos en este caso que ha captado atención tanto entre la comunidad hispana en Nueva York como en defensores de derechos humanos.
